Presentación

José María Quintana Cabanas (1930-2013) fue un pedagogo y filósofo nacido en Bagà (provincia de Barcelona, España), un pueblo del Prepirineo catalán. Comenzó dedicándose a la enseñanza, y desde 1965 fue profesor, y luego Catedrático, en la Universidad de Barcelona, después en la Universidad Autónoma de Barcelona y, desde 1987, lo fue en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED, en Madrid), en la cual desde el año 2000 lo fue como Profesor Emérito.

Fue autor de 65 libros, participó en la redacción de muchos otros, publicó 293 artículos y tradujo 34 libros.

En Internet, de José María Quintana Cabanas constan numerosas referencias de sus escritos o actividades científicas.

Tiene docencia, investigación y publicaciones en los siguientes ámbitos:

  • Pedagogía
  • Filosofía
  • Filosofía de la Educación
  • Sociología de la Educación
  • Psicología

Curriculum Vitae

El que fue el curriculum vitae completo de José María Quintana Cabanas está publicado, sucesivamente, en dos libros:

1. Hasta 1995: en Por una Pedagogía Humanista (Dykinson/Narcea, Madrid 1995), pp. 17-50.
2. De 1995 a 2005: en Bases para una Pedagogía Humanista (PPU, Barcelona 2005), pp. 11-29.

Ofrecemos aquí un extracto del mismo:

1950: Maestro Nacional.
1958: Licenciado en Pedagogía.
1965: Licenciado en Filosofía. Comienza su docencia en la Universidad de Barcelona.
1967: Doctor en Pedagogía.
1975: Profesor Adjunto Numerario.
1981: Catedrático de Sociología de la Educación.
2000: Profesor Emérito.

Fue profesor de estas asignaturas: Introducción a la Filosofía, Introducción a las Ciencias de la Educación, Teoría de la Educación, Filosofía de la Educación, Sociología de la Educación, Pedagogía Social, Pedagogía Comparada.

Realizó diversas investigaciones. En 1968 obtuvo la beca "Juan March" para hacer una investigación de Filosofía en Alemania (en Munich, con el Prof. Reinhard Lauth) durante un año. Dirigió 10 Tesis de Licenciatura y 19 Tesis Doctorales.

Entre los puestos directivos y consultivos que desempeñó, figuran:

1984-87: Presidente de la Sección Científica de Pedagogía Social de la Sociedad Española de Pedagogía.
Desde 1985: Miembro del Consejo Científico y del Consejo Administrativo del Institut Européen Interuniversitaire de l’Action Sociale, en Marcinelle (Bélgica).
Desde 1989: Asesor del Consejo Nacional de Educación de la República Oriental del Uruguay.
Desde 1991: Consejero del Centro de Estudios y Seguridad Social, de Petrópolis (Brasil).
Desde 1997: Consultor Internacional de la Associaçâo Nacional de Animadores Sócio-Culturais, de Portugal, con sede en Vila Real.

Entre los premios y distinciones recibidas, cabe destacar:

1958: Premio Extraordinario de Licenciatura en Pedagogía.
1987: Profesor Honorario de la Universidad Internacional del Mediterráneo.
1990: Miembro Honorario de la Asociación Peruana de Promotores y Animadores Culturales.
1991: Declarado Visitante Ilustre de la Ciudad de San Miguel de Tucumán (Argentina).
1997: Concesión, por parte del Consejo Mundial de Educación, de la Medalla de la Orden al Mérito Cristóbal Colón, en el marco de la Universidad Mayor, de Santiago de Chile.

Participó en congresos y seminarios nacionales e internacionales en los cinco continentes. Visitó universidades, instituciones docentes y de Trabajo Comunitario en diversos países del mundo, pronunciando conferencias y relacionándose con profesores extranjeros, singularmente de Alemania, Italia, Portugal, Francia, Bélgica, Finlandia, Brasil, Chile, Argentina, Venezuela y demás países de América Latina.

Publicaciones

La lista completa de publicaciones de José María Quintana Cabanas se encuentra dentro de su Curriculum vitae, que está publicado en dos libros sucesivos (véase Curriculum vitae). Fue autor de 65 libros (de los cuales 16 están hechos en colaboración, habiendo sido el Coordinador de 13 de éstos). Los principales de sus libros personales son los siguientes:

Pedagogía Social. Dykinson, Madrid 1988, 2ª edic., 533 pp.

Pedagogía Psicológica. La educación del carácter y de la personalidad. Dykinson, Madrid 1989, 283 pp.

Sociología de la Educación. Dykinson, Madrid 1989, 514 pp.

Pedagogía Estética. Concepción antinómica de la Belleza y del Arte. Dykinson, Madrid 1993, 413 pp.

Teoría de la Educación. Concepción antinómica de la educación. Dykinson, Madrid 1995, 2ª edic., 365 pp.

Pedagogía Moral. El desarrollo moral integral. Dykinson, Madrid 1995, 657 pp.

Raíces griegas del léxico castellano, científico y médico. Dykinson, Madrid 1996, 2ª edic., 1.418 pp.

Pedagogía Axiológica. La educación ante los valores. Dykinson, Madrid 1998, 438 pp.

La Axiología como fundamentación de la Filosofía. UNED, Madrid 2000, 142 pp.

El sociologismo pedagógico. Síntesis, Madrid 2000, 187 pp.

Las creencias y la educación. Pedagogía Cosmovisional. Herder, Barcelona 2001, 219 pp.

La educación está enferma. Informe pedagógico sobre la educación actual. Nau Llibres, Valencia 2004, 224 pp.

Pacifismo, cultura social e interculturalidad. Perspectivas desde la educación. PPU, Barcelona 2005, 239 pp.

La educación en valores y otras cuestiones pedagógicas. PPU, Barcelona 2005, 221 pp.

Eduquemos mejor. Guía para padres y profesores. CCS,Madrid 2007, 238 pp.

La espiritualidad cristiana. Ascética y Mística. San Pablo, Madrid 2009, 245 pp

Las personas introvertidas. Autoconocimiento, autoaceptación, ayuda. CCS, Madrid 2007, 140 pp.

Del sentimiento de inferioridad a la autoestima. CCS, Madrid 2010, 101 pp.

Las personas emotivas-impulsivas. CCS, Madrid 2010, 94 pp.

El estrés: ¿descargarlo o prevenirlo? CCS, Madrid 2011, 98 pp.

Ni lobo ni cordero. El hombre es un ser mejorable. PPU, Barcelona 2012, 165pp.

Ensayo crítico de Mística Comparada. La espiritualidad oriental y la cristiana. Aracne editrice, Roma 2011, 267 pp.

Historia de la Ascética y la Mística cristianas. PPU, Barcelona 2012, 228pp.

Pensamiento pedagógico en el idealsimo alemán y en Schleiermaccher(investigación para la CEYR. Se publicó en la Edit. BAC, Madrid)

Entre libros y artículos de revista (o capítulos en libros colectivos), José María Quintana escribió (hasta el año 2006) un total neto de 16.868 páginas. Su libro Pedagogía Comunitaria fue traducido al francés; su Pedagogía Estética, al italiano, y su Teoría de la Educación, al portugués. Tiene 25 artículos publicados en revistas extranjeras.

Filosofía personal

En cierto modo, el Prof. Quintana fue, en Filosofía, un ecléctico, debido al método discursivo que emplea, que es el método antinómico. En todas las cuestiones filosóficas planteadas, observa dos posiciones contrapuestas y excluyentes entre sí. En todas ellas encuentra Quintana algo de verdad, por lo cual trata de conciliarlas; toma siempre, con esto, una posición intermedia, que podemos llamar realista o de "sentido común", en todas las cuestiones: conocimiento, naturaleza humana, ética, estética, valores, etc.

Contra el empirismo radical y el positivismo, admite la existencia y validez cognitiva de la Razón, que abre al conocimiento humano el ámbito metafísico e ideal. Entiende el conocimiento racional como un conocimiento apriórico del cual dimanan principios absolutos en lo cognitivo, lo ético y lo axiológico. Pero Quintana no es un racionalista, pues no concibe la razón humana funcionando de un modo abstracto y unilateral (como en Descartes o Leibniz), sino unida a los aspectos afectivos de la persona (como en Agustín, Pascal o J.H. Newman). Con lo cual, entiende al hombre no como un ser "racional", sino como un ser "razonable", cuyo órgano racional de conocimiento no es la razón, sino la sabiduría.

Esta sabiduría es la que orienta al hombre para determinar sus propios postulados en toda su actividad racional personal: su posición ante los dilemas idealismo/empirismo, espiritualismo/materialismo, trascendencia/inmanencia, absolutismo/relativismo, libertad/determinismo, colectivismo/individualismo, etc. Tales dilemas –dice Quintana– no admiten una solución teórica objetiva, sino que la solución se la tendrá que dar, creativamente, cada persona a sí misma, confiriendo así un sentido a su vida y definiendo su propia cosmovisión. A esto lo llama Quintana hacer una afirmación de valores, con la cual cada ser humano determina su filosofía personal. En esto consiste –dice Quintana– el "axiologismo", siendo la aportación que él hace a la Filosofía, tal como la expone en su libro La Axiología como fundamentación de la Filosofía (2000).

Al elaborar la Pedagogía Estética, Moral o Axiológica, el Prof. Quintana hace, en la Primera Parte de los correspondientes libros, un tratado completo y profundo de la Filosofía Estética, Moral o de los Valores, que servirá de base a la correspondiente Pedagogía. Adopta siempre, en tales tratados, una postura personal crítica y fundamentada, utilizando el método antinómico.

Filosofía de la Educación

Las aportaciones de Quintana a la Filosofía de la Educación conciernen a cuatro puntos.

  1. Siendo este autor muy aficionado a la Epistemología Pedagógica, se preocupó ante todo por establecer el concepto de Filosofía de la Educación, cosa necesaria ante las arbitrariedades existentes en este campo (por ej., el concepto anglosajón –puramente pragmático– de esta disciplina). En este tema adoptó una postura muy personal, estableciendo un concepto dual de Filosofía de la Educación, la cual concibe, en primer lugar, como una "crítica de la razón pedagógica": y dado que la razón puede entenderse de dos modos (a saber, como razón meramente "funcional", según quieren los positivistas, o como razón "trascendente", según la concepción racionalista), surgen de aquí dos corrientes muy distintas de Filosofía de la Educación. En segundo lugar, Quintana ve esta disciplina como una "Filosofía aplicada", en este caso a la educación, aportando a la misma los principios filosóficos y antropológicos en los cuales ha de basarse.
  2. El naturalismo es una cosmovisión que es dominante en la Pedagogía contemporánea. El naturalismo pedagógico, por consiguiente, es un tema básico de Filosofía de la Educación que –cosa inaudita– los especialistas de esta materia tienen totalmente olvidada. No así para Quintana, que ha vuelto sobre él repetidas veces, para criticar el naturalismo y distanciarse de él. Distingue dos tipos de naturalismo: el "romántico" (de Rousseau) y el "científico" (de los positivistas y materialistas). El primero lo juzgó severamente en su libro La educación está enferma (2004), llamándolo una "paranoia cultural" (colectiva y endémica); y para superar el primero y el segundo propuso un sistema de Pedagogía Humanista.
  3. El concepto de formación, que es clave en Pedagogía, también está casi olvidado por los pedagogos de nuestro país. Quintana lo reivindicó, a partir de la Bildung alemana, como un concepto clave en la teoría de la educación humana.
  4. Para la educación moral, estética, axiológica, religiosa, sexual, social y otros aspectos de la educación, y hasta para el propio concepto de esta misma (su posibilidad, sus límites), la Pedagogía necesita de unos correspondientes principios que la Filosofía y la Antropología le han de proporcionar, y para esta función está precisamente la Filosofía de la Educación. Muy consciente de esto, el Prof. Quintana, que cultivó todos estos campos, cuidó de describirlos, fundamentarlos y comentarlos.

Leer artículo: Concepto de Filosofía de la Educación (Revista Española de Pedagogía, núm. 157, julio-septiembre 1982)(pdf y web)

Leer artículo: La Filosofía de la Educación como "crítica de la razón pedagógica" y como una "filosofía aplicada" (Revista Española de Pedagogía, núm. 157, julio-septiembre 1982)(pdf)

Antropología

Hay tres tipos de Antropología: la Científica, la Filosófica y la Cultural. Veamos cómo Quintana aplica los dos últimos a la educación (surgiendo así la Antropología Pedagógica).

La Antropología Filosófica se ocupa del concepto de persona, de la naturaleza humana y de la relación entre individuo y sociedad. Estos temas son básicos para determinar los fines de la educación. En esto, la postura de Quintana es la siguiente. Al admitir –como dijimos– la dimensión "trascendente" de la Razón humana, se concibe al hombre como un ser dual, integrado por la animalidad (tendencias, afectos) y la racionalidad, lo cual es fuente de conflictos éticos, que pueden y deben ser positivamente resueltos por el hombre en virtud de su responsabilidad, la cual es posible gracias a su libertad. En este tema es básico su libro: Ni lobo ni cordero. El hombre es un ser mejorable

En la antinomia de la relación entre individuo y sociedad, Quintana huye tanto del individualismo como del sociologismo (a este último le ha dedicado un libro), abogando por el personalismo.

Quintana sostiene que toda teoría de la educación se basa en una antropología concreta y, de acuerdo con esto, en su libro Teoría de la Educación (1995) recurre continuamente a las diversas concepciones antropológicas, como clave para entender o explicar las distintas concepciones pedagógicas. Insiste en que los principios antropológicos son necesarios para resolver tres grandes problemas de la educación: la opción entre una educación permisiva o una educación coactiva, la superación del egocentrismo infantil y la de la agresividad humana.

La Antropología Cultural tiene aplicaciones pedagógicas en el ámbito del ocio y tiempo libre y de la Animación Sociocultural. Quintana las extiende también al de la llamada "educación intercultural", haciendo interesantes observaciones sobre las relaciones interculturales, tema hoy día tan candente. También se ocupa de la cultura popular y, tras mostrar el valor humano de la misma, sale al paso de la actual tendencia a mitificar la cultura popular, es decir, toda cultura popular (aun las más primitivas), mostrando que la misma no tiene un valor absoluto, sino relativo, y que la idea de "progreso" (que constituye un valor humano positivo) obliga a que las culturas rudimentarias no sean mantenidas, sino superadas. También enumera y describe las patologías de la cultura popular, que pueden revestir hasta ocho formas distintas.

Pedagogía Estética

Quintana dialoga con las teorías estéticas de muchos autores, tanto clásicos como contemporáneos y, a partir de las mismas (y considerando sus antinomias), llega a posiciones propias. Parte de la consideración dual del ser humano y afirma que el fenómeno estético atañe al hombre total, con su razón y su afectividad (o sensibilidad). En consecuencia, lo estético tiene dos dimensiones: una racional y otra afectiva.

Esto se proyecta en el concepto de arte, el cual –por lo mismo– no puede reducirse a ser mera expresión (o cosa de la afectividad; como quieren las vanguardias contemporáneas), sino que también ha de incluir la forma (o elemento "racional", manifestado en los cánones o normas del arte).

Estos dos modos de ver el arte se proyectan, luego, en el modo de entender la educación estética; pues mientras para los vanguardistas la formación del artista se limita a dejar que éste se exprese espontáneamente, para los estetas tradicionales la educación artística enseña a observar las normas clásicas del arte (o de las artes), ejercitándose en las mismas.

El propio concepto de belleza ha sido ya puesto en entredicho por la Estética contemporánea, que es de corte empirista y positivista. Esto se explica porque el concepto de belleza, por su carácter racional, fue objeto de muchas consideraciones en la Metafísica tradicional; mas, para cualquiera que admita la racionalidad humana –y este es el caso de Quintana, el concepto de belleza (con toda su problematicidad) sigue en pie, constituyendo el alma del fenómeno estético y de la concepción del arte, el cual ha de ser definido como "la creación artificial de la belleza" (en la cual debe entrar, según decíamos, también la "expresión", pero no sólo ésta).

Ahora bien, la educación estética no es sólo la educación "artística" (en sentido activo y pasivo), sino también una educación de la sensibilidad humana para que las personas sean capaces de captar, gozar, vivir y producir los valores estéticos que pueden y deben adornar la vida humana.

Pedagogía Moral

La Moral, genuinamente, no dimana de la religión, ni de la sociedad, ni de la cultura, sino de la racionalidad humana, la cual dicta unos principios no sólo de conocimiento, sino también de comportamiento. De aquí sale una Moral a priori y absoluta en sus normas generales, aun cuando estas, al ser aplicadas a los casos concretos de la vida, han de adaptarse a sus circunstancias.

Tal es la postura de Quintana, la cual, por no ser la de los empiristas y positivistas, ni la del actual pensamiento postmodernista, ha de ser demostrada y explicada. Esto es lo que hace dicho autor en la Primera Parte de su Pedagogía Moral (1995).

En el terreno de la educación moral, la confrontación se hace, sobre todo, con Kohlberg, el cual (siguiendo a Piaget), con una concepción empirista, hace una ética puramente de convivencia y de consenso, una moral democrática, que excluye los imperativos éticos categóricos. Con esto, se queda en una "ética mínima", que cuenta hoy día con tantos partidarios. Es la teoría que él llama del "desarrollo moral", el cual se aplica sólo a la formación del juicio moral como única forma de educación moral.

Quintana critica esta concepción y le opone la teoría del Desarrollo Moral Integral (DMI), el cual entiende la educación moral como la formación, también, del sentimiento moral y de las actitudes morales y, más aun, de un buen comportamiento moral, sobre la educación del carácter y de la voluntad del individuo. Pero este DMI concibe, además, la consideración de una "moral superior" que, más allá del egoísmo individual y colectivo, aconseja la generosidad, el sacrificio y el amor desinteresados, es decir, los ideales humanos superiores. Quintana demuestra que el "desarrollo moral" de Kohlberg es sólo la octava parte de lo que ha de ser un verdadero DMI.

Pedagogía Axiológica

La educación en valores se ha puesto actualmente de moda (en España, desde la implantación de la LOGSE, en 1990), y en ella sucede lo mismo que acabamos de ver en la educación moral (pues la moralidad es uno de los valores). En efecto, no se conciben los valores como absolutos sino como relativos, con lo cual la educación en valores no consiste en proponer (o inducir, o imponer) unos valores ideales, sino en admitir que cada cual tiene los suyos y que, por lo mismo, son los buenos para él, debiendo conocerlos, afirmarlos y vivirlos. Es el llamado método de "clarificación de valores".

Quintana se opone a este tipo de educación axiológica puramente permisiva, entendiendo que, si hay unos valores objetivos y justificados en sí mismos, la educación ha de procurar que el educando los conozca, los acepte y ajuste a ellos sus valoraciones personales. Esta función constituye un deber del educador.

Mas, para llegar a tal teoría de la educación axiológica, hay que demostrar antes que los valores poseen este estatuto ontológico. Esto es lo que hace el Dr. Quintana en la Primera Parte de su Pedagogía Axiológica (1998), en la que compone todo un tratado de Filosofía de los Valores (el único existente hoy día en España), exponiendo la historia de esta filosofía y las discusiones en torno al concepto de valor, los sistemas y escalas de valores y la cuestión de si estos son absolutos o relativos. Dentro de un sistema de Filosofía racional (no decimos racionalista), la educación en valores supone una guía educativa al educando para que éste se oriente correctamente en la difícil tarea de saber hacer unas valoraciones correctas.

Pedagogía Cosmovisional

Con este tema, José María Quintana Cabanas incide en el discutido terreno de la educación religiosa, aportando una solución muy original, puesto que no consiste en apoyar tal o cual postura, sino en proponer una postura enteramente nueva, distinta, pues no se tratará ya de una educación "religiosa", sino de una educación "pre-religiosa". Nos explicaremos.

Partiendo del hecho del pluralismo religioso y la libertad religiosa, que la escuela debe respetar, no se trata de buscar subterfugios, como el sustituir la enseñanza de la Religión por la de la Ética o de la Cultura Religiosa (que son materias distintas de aquella, y dignas por sí mismas de figurar en el currículo escolar). Lo que propone Quintana es algo que hay que enseñar a todos, creyentes de la confesión que sea o agnósticos, a saber: el formarse una concepción del mundo consciente y expresa, una cosmovisión ilustrada, reflexiva y crítica. Se trata de considerar seriamente el tema de las creencias (su valor humano, su función humana), del sentido de la vida y del papel de la religión en la existencia humana.

A la teoría de este tipo de educación, el Prof. Quintana la llama "educación cosmovisional", y su teoría la ha expuesto en su libro Las creencias y la educación. Pedagogía Cosmovisional (2001), en el cual describe también las distintas posturas que, en Pedagogía, se han adoptado ante la educación religiosa.

Pedagogía Social

Este es uno de los temas pedagógicos por los cuales es más conocido el Prof. Quintana, puesto que pasa por ser el introductor de la Pedagogía Social en España. Esto ha sido a raíz de la publicación de su libro Pedagogía Social en 1984 (tras un estudio sobre ésta y un manual para la UNED aparecidos en 1976 y 1977). Dicho libro fue el único existente en España sobre esta materia durante diez años.

El caso es que la Pedagogía Social, presente en los planes de estudios de Pedagogía universitaria desde los años de 1950, había sido suprimida en los mismos en los años de 1970, por la moda –introducida entonces– de sustituir la "Pedagogía" por las "Ciencias de la Educación", creyendo que estas eran más "científicas" y debían arrinconar la vieja Pedagogía. Se pensó –erróneamente– que la "Sociología de la Educación" era la sustituta moderna de la "Pedagogía Social", sin caer en la cuenta de que eran dos materias distintas, y tan importante la una como la otra para figurar en un plan de estudios pedagógicos. El mérito de Quintana fue precisamente el darse cuenta de este error, denunciarlo y rectificarlo.

Pero la noción que él introdujo entonces de Pedagogía Social era innovadora con respecto a la concepción antigua. Ésta se refería solamente a la teoría de "la educación social del individuo" (su socialización, su adaptación a los grupos, la educación cívica, la educación política, la educación para la paz, etc.). Esta concepción de la Pedagogía Social era válida, pero el Dr. Quintana había observado que en Alemania (pdf) había otro modo de entender, estudiar y ejercer la Pedagogía Social: se trataba de una forma "educativa" del Trabajo Social por la cual se asistía, por la educación, a individuos y grupos socialmente marginados o con problemas vivenciales; la formación de los pedagogos sociales se hacía con una carrera corta, de tres años, que los capacitaba para aquella función. Con esto, se podía dar salida profesional a muchos estudiantes de Pedagogía que, en el estudio de la misma, veían poca perspectiva de futuro. La implantación de esta carrera de Pedagogía Social se hizo efectiva en España en 1991 al establecerse oficialmente la Diplomatura en Educación Social.

Con todo esto, la Pedagogía Social, en España, tiene el doble carácter que le señaló Quintana: como ciencia de la educación social del individuo y ciencia, también, del Trabajo Social hecho desde la educación.

Llegir article Trabajo social y Pedagogía social: relaciones entre sus campos y comptetencias profesionales (Pedagogía social: revista interuniversitaria, 9, 173-183. ISSN 1139-1723) (pdf)

Pedagogía Psicológica

La Caracterología es una ciencia bastante intuitiva que, por este motivo, es rechazada por la Psicología académica actual. El Prof. Quintana la hubo de estudiar en sus años de formación (1950), y lo cierto es que le ha servido tanto, en su vida profesional (en la educación especialmente), que no sólo no la ha abandonado, sino que se dedica a propagarla y aconsejarla. Su libro Pedagogía Psicológica. La educación del carácter y de la personalidad (1989) es de los raros que tratan esta temática.

La tipología con la cual trabaja Quintana es la refundición de las de Kretschmer y de Sheldon, con elementos de algunas otras análogas. Se presta al conocimiento de las personas a través de su carácter, a una técnica de mejora de las relaciones humanas (también en la familia, en la escuela y en el ambiente de trabajo) y a la orientación profesional.

Pero una de sus mayores utilidades es el tratamiento de los problemas de carácter: su diagnóstico, el conocimiento de sus peligros y la superación de los mismos. Problemas de carácter son la introversión, la actitud dominante, la timidez, el sentimiento de inferioridad, el carácter impulsivo y variable, y la tensión interior. Son problemas muy frecuentes y de consecuencias lamentables, tanto para el individuo como para sus relaciones con los demás. Por otra parte, el tratamiento de tales problemas es puramente educativo (no es complicado; puede ser ejercido por los educadores normales –padres y maestros– sin requerir la intervención del psicólogo). Por todo esto, urge impulsar tal tipo de educación, en bien de todos en general y de quienes sufren problemas de carácter en particular.

Tal es la educación psicológica, una propuesta original del Dr. Quintana y que debería ser muy atendida.

Pedagogía Familiar

La Pedagogía Familiar es, hoy por hoy, una cenicienta dentro de las Ciencias Pedagógicas; hay instituciones privadas que se ocupan de ella pero, en la Pedagogía universitaria, ha tenido poco eco. Ahora bien, el Prof. Quintana, sin duda por haber ejercido inicialmente en la enseñanza escolar, le ha prestado atención, habiéndole dedicado un libro en 1969 y otro en 1993. Se trata, en ellos, de orientar a los padres para que sepan desempeñar bien su función educadora, tanto sincrónicamente, esto es, atendiendo simultáneamente a todos los ámbitos de la educación infantil (educación física, educación moral, educación religiosa, educación afectiva o sexual, educación psicológica, etc.), como diacrónicamente, o sea, según los distintos períodos evolutivos de los hijos (primera y segunda infancia, adolescencia, juventud). Hay unos campos específicos de educación de los hijos: atención a su trabajo y progreso escolar, buena inserción social, orientación profesional adecuada; pero lo más delicado es la formación del talante moral de los hijos, lo cual se consigue sobre todo con el estilo de vida familiar que se lleva. Entran aquí temas tan importantes como el grado de permisividad dado a los hijos, las comodidades con que se los rodea, el control de su uso de los medios de comunicación y del ordenador, etc.

Los padres están llenos de buena voluntad, pero esto no basta. La educación es cosa muy compleja, y más si se trata de hijos con dificultades especiales, y es preciso tener información sobre lo que ocurre y lo que hay que hacer. Sólo educadores muy experimentados pueden, en todo esto, ser unos auxiliares competentes de los padres. A estos les recomienda Quintana actuar según los siguientes principios: atenerse al término medio; estimular la actividad de los hijos; exigirles el cumplimiento de sus deberes; hacerles acatar el principio de autoridad; no hacerles la vida excesivamente fácil y regalada; satisfacer las necesidades profundas de los hijos, pero no todas sus apetencias superficiales; tratar de conocer bien a los hijos; cultivar el diálogo con ellos y ser constante en la aplicación de las normas.

Pedagogía Comunitaria

Quintana tiene publicado un libro titulado Pedagogía Comunitaria (1991). Es un libro que expone la situación de la Educación de Adultos en los diversos países de Europa, entendiendo que este tipo de educación sirve para procurar el Desarrollo Comunitario, ya que ella no ha de consistir tanto en dar instrucción a los Adultos sino, más bien, una conciencia de su situación y, cuando ésta es de opresión, voluntad y medios para superarla.

Tal es la idea que Quintana vivió y propagó en su época de pertenencia (años de 1980) al Group Européen de Recherche Participative, entroncado con el ICAE (International Council for Adult Education, radicado en Toronto, Canadá). Organizó en Barcelona (1985) un Seminario de expertos de este grupo y, fruto del mismo, fue el libro que publicó: Investigación Participativa (1986), el cual introdujo en España esta concepción y esta metodología de Educación de Adultos.

Epistemología Pedagógica

Entre sus colegas, el Prof. Quintana tenía fama de precisión y agudeza en establecer los conceptos de las distintas disciplinas pedagógicas, distinguiendo sus afinidades y diferencias y delimitando bien los campos y temas respectivos. Esto le ha permitido distinguir, por ejemplo, entre Sociología de la Educación, Sociología Pedagógica y Pedagogía Sociológica; o entre Psicología de la Educación, Psicología Pedagógica y Pedagogía Psicológica; o entre Pedagogía General y Teoría de la Educación, y otras.

(Leer artículo, pdf)

Pero, en este campo, la aportación más significativa y útil de Quintana ha sido su distinción entre "Ciencias de la Educación" y "Pedagogía", establecida en 1983 y en la cual ha ido insistiendo. Convenía mucho hacerlo desde la moda, aparecida en los años de 1970, de arrinconar el nombre de "Pedagogía" para sustituirlo por el de "Ciencias de la Educación", pretendiendo con esto dar aires de ciencia y de modernidad a la Ciencia de la Educación (otro nombre que también entra en la lid).

Lo que se hizo, sin embargo, fue suprimir algunas importantes ramas de la Pedagogía (y hasta la propia Pedagogía General, que, desde entonces, no ha vuelto a levantar cabeza) y sembrar una triste confusión en la Epistemología Pedagógica.

En esta situación, Quintana saltó a la palestra que la Pedagogía y sus diversas ramas son cosa distinta de las Ciencias de la Educación (Economía de la Educación, Biología de la Educación, Psicología de la Educación, Sociología de la Educación, etc., a las que antes se llamaba "ciencias auxiliares de la Pedagogía"). Una (Pedagogía) y otras (Ciencias de la Educación) son diferentes por su objeto: el de la Pedagogía es una acción ("el educar, el acto educativo"); el de las Ciencias de la Educación un hecho (el resultado de la educación, en el individuo o en la sociedad). Además (y por lo mismo), la Pedagogía es una ciencia normativa, mientras que las Ciencias de la Educación son ciencias descriptivas.

Un buen currículo de estudios sobre la educación ha de contener tanto la Pedagogía (con sus diversas ramas: Pedagogía Social, Pedagogía Moral, Pedagogía Experimental, Pedagogía Diferencial, etc.) como las Ciencias de la Educación; lo que no vale, es creer que, al poner estas últimas, las primeras sobran.

En 2005 Quintana publicó, siguiendo estas ideas y de forma gráfica, "El árbol de la Ciencia de la Educación", donde el tronco es la Pedagogía General, las ramas son las diversas Ciencias Pedagógicas, y las raíces son las Ciencias de la Educación. Pero en este árbol hay unas curiosidades interesantes, que también se explican.

Teoría de la Educación

La Teoría de la Educación explica la educación en sus aspectos esenciales: sus objetivos, sus principios, sus medios y sus métodos generales. Todo esto se entiende de uno u otro modo según el concepto de persona que se tenga, por lo cual no hay una teoría de la educación objetivamente válida para todos, sino que cada autor (y cada educador) tiene la suya, la cual debe él haberla elaborado a partir de una reflexión crítica sobre las diversas teorías existentes. Así lo entiende el Prof. Quintana, el cual ve en la educación un objeto muy complejo, lleno de antinomias (21 antinomias ha encontrado y analizado él), que sitúan la acción educativa entre un dejar hacer y un guiar, entre la libertad y la autoridad, entre lo natural y lo cultural, entre lo social y lo individual, entre la ciencia y el arte, entre lo intelectual y lo afectivo, etc.

En todas estas alternativas, Quintana adopta siempre una posición de término medio, que él llama "realista" y que, de un modo general, entiende la educación como una ayuda al educando, porque se admite que éste, por su propio desarrollo natural, se orienta ya hacia los fines de la educación, pero no de un modo seguro y sin fallos, siendo preciso, a veces, estimularlo, encauzarlo y corregirlo, es decir, "ayudar" a su proceso natural de desarrollo para que éste sea perfecto.

Con esto, Quintana se distancia de la tendencia contemporánea, muy extendida, de dejar la iniciativa de la educación e instrucción al propio educando. Afirma la necesidad de la autoridad educativa en el educador y de la imposición de la cultura sobre la naturaleza, para asegurar en el educando su mejor desarrollo humano.

La crítica a la educación actual

En su libro La educación está enferma (2004), José María Quintana Cabanas indica los fallos de la educación actual (en los países occidentales), así como sus causas, sus peligros y sus remedios. Los síntomas los ve tanto en la educación escolar (bajo nivel de conocimientos obtenidos, el fracaso escolar, una falta de disciplina, de respeto y de autoridad en las aulas y la presencia, en éstas, de violencia y de indisciplina); en las familias, se exige poco a los hijos y se los rodea de demasiadas comodidades. Todo esto puede resumirse en el síndrome de la flojedad y la desorientación.

Esta desorientación está, sobre todo, en el propio sistema educativo y en los principios en que se inspira. A este respecto, Quintana critica enérgicamente el "naturalismo pedagógico" reinante hoy día (esperar demasiado de la espontaneidad del alumno) y el desprestigio en que han caído los métodos tradicionales de estudio (uso de manuales, etc.) a favor de los métodos "activos" y "globales", que son inadecuados para alumnos ya mayores. Igualmente censura el principio de "comprensividad", por el que se mezclan, en una misma aula, alumnos de capacidades y posibilidades muy diferentes.

Todo esto se explica y demuestra a partir de principios pedagógicos evidentes, y señalando los errores de principios y prácticas habituales (excesiva optatividad del alumno, promoción automática de curso, abuso de la teoría constructivista del aprendizaje, poca apelación al esfuerzo del alumno para aprender). Esto último, unido a la poca autoridad que se concede a los profesores y al malestar existente en las aulas, sitúa a éstos en una posición profesional incómoda, frustrante y desalentadora. Quintana propone, como remedio, educar y enseñar según el modelo de la Pedagogía Humanista.

Una Pedagogía Humanista

Por humanismo entendemos el modelo cultural que expresa "lo esencial humano", esto es, aquello por lo cual el hombre es hombre en un sentido pleno que lo dignifica, y que confiere al género humano una excelencia que lo sitúa por encima de todo el mundo existente. Hay diversas concepciones de humanismo, pero nosotros nos situamos en el humanismo tradicional o europeo, que parte del humanismo clásico grecorromano, enriquecido con el espíritu cristiano, el Renacimiento, la Ilustración, el neoclasicismo alemán y las formas más constructivas del humanismo contemporáneo. Se reconoce la "razón" como el distintivo humano específico, con lo cual se valora todo lo racional que hay en los principios éticos, axiológicos, estéticos, jurídicos y culturales. Se estima la cultura y se la considera como un ideal de educación.

Pero, en la Filosofía moderna y contemporánea, el concepto de "razón" ha entrado en crisis, muy manifiesta en el actual pensamiento postmodernista, de modo que, para muchos, no puede hablarse ya de naturaleza humana, de moral natural ni de principios ideales absolutos.

Ahora bien, el Prof. Quintana sigue afirmando las posibilidades de la razón como órgano trascendente de conocimiento y de orientación humana, cosa que se proyecta en una concepción de la educación, la cual entronca así con lo que fue en la mejor tradición cultural europea. Tal es la propuesta de una Pedagogía Humanista (pdf).

Para establecer las tesis de ésta, consideremos que el concepto de "humanismo" se opone al de "naturalismo" y que, por ende, la educación humanista se opone a una educación naturalista.

Hay dos clases de naturalismo: el romántico (o rusoniano) y el científico (del positivismo y el materialismo). Para el naturalismo romántico, la educación consiste en: 1) "dejar hacer" al educando; 2) enseñarle con métodos "activos y globales". Para el naturalismo científico, no existen principios éticos ni valorativos ideales y absolutos, por lo cual esos temas se resuelven por mero consenso social.

De lo anterior, y por oposición a ello, se deduce que las tres grandes tesis de la Pedagogía Humanista son estas: 1) Una pedagogía que guía, estimula y corrige al educando; 2) una pedagogía que habitúa al alumno a un trabajo intelectual sistemático; 3) una pedagogía que tiende a unos valores ideales y que propone ciertas normas absolutas.

Con motivo de su 75º aniversario, la UNED publicó un Liber amicorum: Bases para una Pedagogía Humanista. Liber amicorum: dedicado al profesor emérito Dr. D. José María Quintana Cabanas con motivo de su 75º aniversario.

Sociología de la Educación

Las oposiciones que el Dr. Quintana ganó y las cátedras universitarias que regentó fueron de Sociología de la Educación. Fue, pues, un especialista en la materia, y de los primeros que hubo en España. Además fue él quien normalizó esta materia como disciplina curricular. Esto lo hizo con la publicación, en 1977, de su manual Sociología de la Educación. La enseñanza como sistema social, que sirvió a muchos profesores, entonces, para preparar sus oposiciones a cátedras de esta materia, recientemente creadas.

Dicho manual tuvo una larga historia; en 1989, el autor lo refundió y actualizó, y en su día siguió sirviendo, con datos y bibliografía actualizadas que constaban en los Cursos virtualizados de la UNED. El libro se divide en dos partes: una Macrosociología de la Educación, que estudia la educación en la sociedad (como factor de reproducción y de cambio, de movilidad, de selectividad, etc., y una Microsociología que analiza la educación en los diversos grupos sociales (familia, escuela, los maestros).

Quintana hizo ya su Tesis Doctoral en esta materia, que dio lugar a la publicación de un libro: El niño en las distintas clases sociales (1970). El autor hizo también contribuciones a la historia de la Sociología de la Educación en España, en Italia y en Alemania, con sendas publicaciones monográficas.

Animación Sociocultural

El Prof. Quintana se interesó por la Animación Sociocultural a partir de la dimensión educativa que ésta tiene, tema relacionado con la Pedagogía Social. Contribuyó a introducir aquella materia en el currículo de estudios universitarios, pese a las reticencias que inicialmente mostraron los animadores profesionales; el manual coordinado por él: Fundamentos de Animación Sociocultural (1985) fue decisivo en este sentido.

Siguiendo sus aficiones epistemológicas, Quintana se aplicó a definir el concepto de Animación Sociocultural, que, en general, es como un cajón de sastre en el que caben materias muy diversas, hasta hacerla coincidir con la Educación de Adultos. Él propone distinguir entre el concepto genérico "animación" y los conceptos específicos de animación "social", animación "cultural" y animación "sociocultural".

La profesión de la Animación tiene el peligro de interferir con otras de actividad análoga: Trabajo Social, Gestión Cultural, Acción Comunitaria. También fue una aportación de Quintana el distinguir finamente entre estos diversos campos. Además, en su libro Los ámbitos profesionales de la Animación (1993), se diferencia las distintas tareas profesionales de la Animación, describiendo los perfiles de animador requeridos en cada caso.

Obras filológicas

Como fruto de sus estudios humanísticos, el Prof. Quintana cultivó, al margen de sus ocupaciones pedagógicas y filosóficas habituales, una afición a las etimologías griegas, que lo llevó a confeccionar, durante siete años de intenso trabajo, un voluminoso diccionario de Raíces griegas del léxico castellano, científico y médico (Dykinson, Madrid 2006, 3ª edic., 1.418 pp.), en el que se mencionan unas 3.000 raíces diferentes, con las familias de palabras derivadas; de esas raíces, 1.000 se aplican a la Medicina, y 1.100 a la Biología. Aparecen descritos 28.000 términos, de los cuales 10.000 son de Medicina; 8.500 de Biología; 1.300 de Química; 700 de Física; 1.100 de Geología; 1.300 de Psicología; 1.700 de Filología y Literatura, y 500 de Historia, Geografía y demás.

Pero este diccionario de raíces es más que esto. Va precedido de una explicación de cómo se forman los grecismos castellanos, y seguido de unos completos elencos de monemas griegos de los diversos lenguajes científicos, y de los términos castellanos a los que corresponden monemas griegos. Hay un capítulo de "didáctica de las raíces griegas" (para la enseñanza de las mismas en el sistema escolar) y se concluye con un índice alfabético de todos los términos, por ramas científicas (con sus diversas especialidades) y un índice alfabético de todos los términos explicados.

Aprovechando toda esta fuente, Quintana publicó, para uso de los estudiantes de Medicina y de Enfermería, una Terminología Médica a partir de sus raíces griegas (Dykinson, Madrid 1989, 265 pp.) y una Clave etimológica del vocabulario de la Medicina (Dykinson, Madrid 1990, 55 pp.); y, para los estudiantes de Biología, una Introducción etimológica al léxico de la Biología (Dykinson, Madrid 1989, 155 pp.).

Las traducciones

José María Quintana Cabanas tradujo algunos libros del catalán al castellano, pero sus traducciones solían ser del alemán al castellano (y a veces también al catalán). Son libros de Filosofía o de Pedagogía (y, ocasionalmente, de alguna otra materia).

A) De Filosofía, se trata de obras clásicas. La más importante ha sido Lecciones de filosofía de la historia, de Hegel (Edit. Zeus, Barcelona 1970; PPU, Barcelona 1989, 482 p.); es la traducción de la edición alemana hecha por J. Brunstäd, distinta a la edición de Lasson, que es la que estaba ya traducida al castellano; la primera tiene ciertas ventajas sobre esta última. Otras traducciones de Quintana son:

Kant: La religión dentro de los límites de la sola razón (PPU, Barcelona 1989).

Kant: El único fundamento posible de una demostración de la existencia de Dios (PPU, Barcelona 1989)

Feuerbach: Principios de la filosofía del futuro, y otros escritos (PPU, Barcelona 1989).

Fichte: Introducción a la Doctrina de la Ciencia (Tecnos, Madrid 1987).

B) Pero las traducciones más numerosas de Quintana son de Pedagogía. Suman un total de 1.904 pp., a las cuales hay que añadir las traducciones de Pestalozzi, que se mencionan en el apartado siguiente. Del pedagogo W. Brezinka, tradujo tres libros; de W. Böhm, dos, y de B. Hamann y de S. Uhl, uno. Todos estos son autores que están en la línea de una Pedagogía Humanista. De Anselm Grün tradujo 4 libros (de espiritualidad).

Hay dos libros de José Mª Quintana traducidos al portugués, uno al italiano, y otro al francés.

Traducciones de Pestalozzi

Pestalozzi fue un autor muy fecundo y que no sólo escribió de Pedagogía, sino también de temas sociales, políticos, económicos, jurídicos y literarios. En España se lo conoce sólo como pedagogo, y únicamente por tres o cuatro de sus obras, traducidas hace ya cien años. Frente a esta carencia, el Prof. Quintana acometió la traducción y publicación sistemática de una selección de los principales escritos de Pestalozzi, en una serie de 18 volúmenes, cada uno comentado en una extensa Introducción.

He aquí la lista de tales traducciones:

Cartas sobre educación infantil. Tecnos, Madrid 1988; 3ª edic.: 2006.

La velada de un solitario y otros escritos. Herder, Barcelona 2001.

Sobre legislación e infanticidio. Herder, Barcelona 2002.

El canto del cisne. Laertes, Barcelona 2003.

Algunos escritos sociales. Nau Llibres, Valencia 2003.

Mis investigaciones sobre el curso de la naturaleza en la evolución de la humanidad. Antonio Machado Libros, Madrid 2004.

El libro de las madres y otros escritos. PPU, Barcelona 2004.

Cristóbal y Elsa y ensayos sociopolíticos. PPU, Barcelona 2004.

Los destinos de mi vida y otros escritos. PPU, Barcelona 2005.

La Carta de Stans y otros escritos. PPU, Barcelona 2005.

Sobre la idea de educación elemental. PPU, Barcelona 2006.

Alocución a su Instituto (1818) y otros escritos. PPU, Barcelona 2006.

Leonardo y Gertrudis (Tercera y Cuarta Parte). PPU, Barcelona 2007.

Algunos escritos políticos. PPU, Barcelona 2007.

Opiniones, experiencias y medios para fomentar un estilo de educación adecuado a la naturaleza humana. PPU, Barcelona 2008.

Pestalozzi a su época / Opiniones sobre un seminario de maestros. PPU, Barcelona 2008.

Cómo Gertrudis enseña a sus hijos. (Traducción de L. Luzuriaga). PPU, Barcelona 2009.

Leonardo y Gertrudis. (Primera y Segunda Parte). (Traducción de E. Ovejero). PPU, Barcelona 2009.

José María Quintana Cabanas publicó en el Portal de la UNED una página dedicada a Pestalozzi.

Estudios sobre la obra de Quintana

Al Prof. Quintana le dedicaron en su día dos libros-homenaje, con ocasión de cumplir sus 65 y 75 años de edad; en ellos se comenta toda su obra. Son éstos:

  • Por una Pedagogía Humanista. Dykinson / Narcea, Madrid 1965.
  • Bases para una Pedagogía Humanista. PPU, Barcelona 2005.

Estudios en que se exponen aspectos del pensamiento de Quintana son los siguientes:

MARQUES, Ramiro: "A Pedagogia de Quintana Cabanas". En Diário do Sul (Portugal), 2.12.1998, p. 21s.

MARQUES, Ramiro: "O modelo antinómico de Quintana Cabanas". En Modelos Pedagógicos Actuais. Plátano Ediçôes Tácnicas, Lisboa 1999, pp. 87-98.

MARQUES, Ramiro: "O modelo de Quintana Cabanas". En INSTITUTO POLTÉCNICO DE SANTARÉM: Educaçâo e Valores em tempos de mundança: a herença clássica. Escola Superior de Educaçâo, 1999, pp. 9-19.

MARQUES, Ramiro: "Modelo de Educaçâo Moral Integral de Quintana Cabanas". En Modelos Pedagógicos Actuais. Plátano Ediçôes Técnicas, Lisboa 1999, pp. 99-106.

MARQUES, Ramiro: "Concepçâo antinómica de Educaçâo. Implicaçoes para o curriculo multicultural cosmopolita". En ROLDÂO, M. Do y MARQUES, R. (organ.): Inovaçâo, currículo e formaçâo. Porto Editora, Porto (Portugal) 2000, pp. 101-19.

UREÑA I LLITJÓS, Josep: "Quintana i Cabanas, Josep Ma". En Autors de la comarca del Berguedà i les publicacions periòdiques de la comarca, des de l’inici de la impremta fins al 1999. Associació Cultural el Vilatà del Berguedà, Gironella (Barcelona) 2000, pp. 70-4.

VILANOU, Conrad: "Situación de la Pedagogía española en el siglo XX", en VILANOU, C. y otros: La educación, un arte extasiológico. Fundación Fernando Rielo, Madrid, 2009, pp. 35-9.

Entrevistas a José Mª Quintana, publicadas en revistas:

EGUÍBAR GALARZA, Mercedes: "La antinomia Educación-Tolerancia". En La escuela en acción, 10.554 (1996) 11-3.

"El futuro de la Pedagogía está en la Pedagogía Social". En Educares. Periódico de la Universidad Educares, Santiago de Chile, 46 (1997) 1s.

SÄEZ CARRERAS, Juan: "Entrevista a José María Quintana Cabanas, Catedrático de Pedagogía Social en la UNED (Madrid)". En Pedagogía Social. Revista Interuniversitaria, 1 Segunda Época (1998) 255-61.

A.G.: "José Mª Quintana Cabanas, ‘padre’ de la Pedagogía Social". Diario de Burgos, 25.09.1999.

Promoción cultural

El Prof. Quintana era hijo de un bonito pueblo de montaña enclavado junto al Túnel del Cadí y que cuenta con un rico pasado histórico medieval y una activa vida asociativa. Allí tenía su segunda residencia y estaba integrado en las actividades culturales de la población. Promovió la publicación del libro Bagà. La capital històrica de l'Alt Berguedà, que es una presentación general de la Villa y ha tenido varias ediciones. Se ocupó (1989) de la reedición de las obras de investigación histórica de Serra y Vilaró: Baronies de Pinós i Mataplana (3 vols.) y El Cançoner del Calic, y también de la obra del baganés Pere Tomic, escrita el año 1438 y que es la primera Historia General de Catalunya. Inició la edición de la serie Història gràfica de Bagà, de fondo fotográfico, componiendo él mismo los tres primeros volúmenes: Dels orígens a 1936 (Vol. 1, en dos tomos); el Vol. 2 abarca el período 1936-1949 (guerra española y posguerra); y el Vol. 3, el período del desarrollo (1950-1973). Estos dos últimos volúmenes llevan una amplia descripción histórica de ambos períodos.

Creación artística

El Prof. Quintana durante su vida cultivó diversas aficiones, siendo las principales: el montañismo, la música y la pintura. El montañismo fue cosa de juventud y un poco también de edad madura; la música le acompañó toda la vida; y la pintura, durante sus últimos quince años.

En la pintura al óleo se dedicó sobre todo al paisaje y paisaje urbano, pero cultivaba también los demás géneros: bodegón, marina, flores y figura humana.

En música tenía buena formación, de nivel medio. Practicaba la ejecución musical y la composición. Tocaba el piano y el órgano, ejerciendo de organista parroquial durante toda su vida. En su parroquia del Corazón de María de Barcelona disponía de un órgano barroco de quince registros. Sus composiciones musicales sumaban (hasta el año 2009) un total de 119, repartidas en estos géneros:

Piezas para piano: 37.- Barcarola (escuchar - partitura )
Piezas para órgano: 54.- Toccata Nº 2 (escuchar - partitura )
Con otros instrumentos: 3
Canto coral: 5
Lieder: 13.- Ave María (Voz de Núria Quintana y órgano) (escuchar - partitura)
Canciones: 9

Más información en la web personal sobre su creación artística

In Memoriam